martes, enero 24, 2006

Fumadores, ya les toca

Entre la amplia gama de seres nefastos que habitan este mundo, los únicos que me preocupan son los que fuman.

No porque me importe su salud.

A mí me importa una chingada el destino y fin de sus miserables existencias, lo que me preocupa es que fumen cerca de mí.

Pero empezando por la raíz del problema

¿Cómo se crea un adicto al tabaco?

en la secundaria (a veces antes, depende por donde vivan) entre los tipos mas "rudos" de la escuela, es bastante común que fumen, porque hacer cosas prohibidas infunde respeto, así que los primeros en iniciarse en el vicio son los clásicos pendejos que le llevan la contraria a TODO solo por conservar su "status de muy rudo"

"arregla tu cuarto" = no lo arreglo
"haz la tarea" = no la hago
"no fumes" = sí fumo

es increíblemente fácil convencer a este tipo de idiotas para que hagan las más diversas pendejadas, solamente hay que plantearles el asunto a modo de reto y su inseguridad hace el resto, los muy estúpidos terminan aventándose al ruedo

Ejemplos que convencen a este tipo de pendejos:

"Hay que tener huevos para irse colgado del trolebús"
"No te atreves a mentarle su madre a ese granadero"
"Necesitas ser realmente muy chingón y tener los huevos bién puestos para bajarte a las vías del metro a recoger esa moneda"

Estos entes pusilánimes son en extremo suceptibles a las pendejadas que ven en las películas, pandilleros negros bien mamados que apagan su cigarro con la lengua, un cabrón que le dispara al tanque de gasolina de un carro y después de la explosión, se regresa a prender su cigarro con las llamas, o la ultra-clásica mamada hollywoodense, el enorme charco de gasolina y el tipo que avienta el cigarro para causar una espectacular explosión.

No es de asombrarse que estos pedazos de mierda se queden con la idea de que si fuman, van a ser como todos esos héroes de película.

Con el tiempo, todos esos imbéciles crecen, y aunque dejan de hacer muchas pendejadas, la mayor permanece, porque para esas alturas del partido ya están enviciados a nivel biológico, no se pueden sentir bien si no tienen nicotina en el organismo.

Cuando alguien les dice que fumar es malo para su salud, se refugian en una frase estúpida que ya es casi un clásico, "de algo me hé de morir", lo que esa frase significa es "no tengo los suficientes huevos para dejar el cigarro" y eso es mucho decir, no hay para qué disfrazar la situación, son unos putos esclavos de una de las adicciones más leves del planeta, no es tan difícil dejar el cigarro como dejar la heroína por ejemplo.

De hecho, si de algo se han de morir, que se inyecten heroína, a fin de cuentas les vale madres, además, de este modo todos ganamos, los malditos adictos tendrán una droga que les da más estilo, (a fin de cuentas la heroína es lo que realmente consumen los actores de hollywood) y yo no voy a gastar tanto en agua mineral, misma que necesito para eructar en la cara de los pendejos a los que se les ocurre fumar junto a mí.

lunes, enero 23, 2006

Ahora, el metro

Van a decir que yo tengo un pleito serio con el transporte público

No es cierto

Tengo un pleito serio con todo el planeta y sus alrededores.

Esta bronca no es contra el metro, a fin de cuentas, es lo menos peor y más barato para transportarse en esta ciudad, mi pleito es con una de esas especies infrahumanas que pudren las entrañas de este sistema de transporte, los bastardos que venden discos de música o videos.

Yo entiendo que tengan que ganarse la vida de algún modo, pero hay modos de vender música pirata que no implican chingarme los tímpanos con un amplificador conectado a un reproductor de CD

Primero pensé que esa maldita maña de subirle todo el volumen era un error exclusivo de los ciegos, como sea, no ven ni madres y se han de imaginar que el vagón tiene aproximadamente el mismo tamaño que el estadio azteca, pero no, todos los bastardos que llevan su amplificador hacen lo mismo

No tengo nada en contra del comercio ambulante en el metro, es a lo que nos ha orillado la situación, no tengo nada en contra de la piratería, otro día hablo de eso, pero en lo que respecta a esos mandriles con amplificador en el lomo, deberían sacarlos del vagón, patearles la cara hasta que no les quede un diente y a continuación arrojarlos a las vías.

lunes, enero 16, 2006

No me pongo ni madres

¿Han visto ese anuncio en televisión donde aparece un zoquete de unos 16 años extendiendo una playera de la selección mexicana de soccer? (se pronuncia "SUCKER")

Hay tantas cosas que me fastidian acerca de este anuncio, que para no extenderme al infinito, me voy a concentrar en un detalle, la pendejada que dice el mozalbete en cuestión

"Nada más quería decirles que pónganse la verde"

¡Bravo imbecil! tu dominio del idioma español casi supera al de un loro verde.

Primero ¿Quería decirles? ¿Ya no quiere? ¿Ya se arrepintió?

Irónicamente, a pesar de ser campeón de SUCKER, éste modo de empezar a hablar, casi disculpándose de antemano, es lo que define la actitud de un maldito perdedor.

Segundo, que manera tan estúpida de cambiar del tiempo pasado al presente en una oración, poner atención a estos "detalles" nos puede revelar de inmediato si estamos perdiendo el tiempo escuchando a un idiota.

Un modo aceptable de organizar su ya de por sí estúpida frase sería:

"Solo quiero decirles que se pongan la verde"

o más fácil, si eso es todo lo que quiere, se puede reducir a:

"Pónganse la verde"

Si tomamos en cuenta que la playera ya la tiene en las manos, puede reducirse más:

"Póngansela"

Ahora que eso es bastante estúpido, ¿que otra cosa podrían hacer con una playera? ¿comérsela? ¿Limpiarse el culo tal vez?

Entonces, concluyendo, lo mejor que pudo hacer ese pequeño subnormal hubiera sido quedarse callado, con ello tendría la ventaja adicional de no acentuar su estupidez.

lunes, enero 09, 2006

Microbuseros parte 2

Siguiendo con las características del servicio:

2 Los microbuseros son el único animal salvaje que a pesar de tener visión estereoscópica, carece totalmente de percepción espacial.

Para ellos siempre "hay lugar atrás" no importa que tan apretada vaya la gente, esta conducta causa que a largo plazo el subnormal al volante vea a la gente del mismo modo que un ganadero vé a sus vacas, en el minúsculo entendimiento del microbusero se queda fija la idea de que entre más gente logre meter, mejor para él.

Eso acaba con cualquier plan de hacer más confortable el viaje para el pasajero, o mejor dicho para la res.

Yo mido aproximadamente un metro 72 centímetros, no me siento particularmente alto, sin embargo no logro encontrar un modo de acomodarme en un asiento con una distancia entre respaldo y respaldo de menos de cuarenta centímetros, que es el espacio que queda después de que estos hijos de su reputísima golfa le aumentan otro par de asientos al ya de por sí incómodo vehículo.

Ahí no para la cosa, otro día les revelaré otra causa del desenfrenado comportamiento de estos idiotas

¿Porqué siguen enviando cadenas?

Muchos de ustedes, zafios mozalbetes, tal vez no lo sepan, pero las fastidiosas e increíblemente estúpidas "cadenas", es decir las cartas que diligentemente fowardean a diez personas para que se les cumpla un deseo, existieron desde antes de que existiera internet.

Esto es una prueba más de que el acceso a la tecnología definitivamente no mitiga la estupidez.

Antes, el asunto no solo requería ser idiota, además era necesario tener mucho tiempo libre para mecanografiar 100 hojas (no tengo evidencia de que estas cosas existieran antes de inventada la máquina de escribir, pero definitivamente son mas viejas que las fotocopiadoras)

El contenido de dichas hojas promete dicha y fortuna al que siga la orden de copiarla 100 veces y distribuírla, así como amenazando a los que no lo hagan con supuestas calamidades que acabarían con su vida.

La verdad siempre quise ver a uno de esos pobres pendejos repartiendo sus hojas de puerta en puerta, porque así cuando menos me podía burlar del subnormal en cuestión.

Ha pasado el tiempo, y ahora no se requiere mas que presionar un botón e inmediatamente envías tu cadena a la gente que haya cometido la pendejada de darte su correo, y con diez o veinte gentes que lo reciban te lo dan por bueno, las personas siguen siendo idiotas, pero ahora perpetran sus pendejadas desde la comodidad de su hogar, ya no es divertido.

El que inventó las cadenas seguramente lo empezó a modo de broma, casi puedo imaginarme la escena, tres amigos platicando de lo tarado que es el vecino de enfrente y pensando en un modo de fastidiarlo, así que deciden ponerlo a copiar una hoja 100 veces y repartir las copias de puerta en puerta, en principio resulta gracioso, debieron haberse cagado de risa al ver al pendejo del vecino con sus hojas bajo el brazo.

Pero nunca pensaron en la distribución exponencial que su bromita tendría, de esas 100 hojas la mayoría caerían en manos de gente pendeja que también se tragarían el anzuelo, y aunque no fuera así, con diez de esas 100 hojas que cayeran en manos de pendejos, se convertirían en 1,000 hojas, luego en 10,000 y seguiría así.

La persona que decidió trasladar el texto de esas cadenas a internet bien pudo ser un bromista, pero más bien parece obra de un pendejo, de la especie más peligrosa, el pendejo con iniciativa, no hay ser vivo en el planeta más peligroso que el pendejo con iniciativa, el muy imbécil se cree una persona perspicaz y dotada de un singular ingenio, nada más lejos de la realidad, la brillante idea de este animal es la causa de que tu correo esté atascado de pendejadas.

Uno podría pensar que seleccionando a las personas a las que les das tu e-mail estás a salvo, ERROR, las personas más inesperadas me han mandado cadenas, y no me refiero a los que te mandan algo sólo porque está chistoso, no, hablo de que lo envían esperando que en serio se cumpla su deseo de ser futbolista profesional y comprarse un ferrari.

Con el tiempo han surgido nuevas cadenas, lo cual es prueba de que alguien encuentra divertido tener a miles de ciber-pendejos aventándose sandeces de una computadora a otra.

Estas bromas no prosperarían sin idiotas que creen que Bill Gates les va a mandar 10 centavos de de dólar cada que reenvíen un "e-mail de prueba", los que creen que reenviando un correo van a ayudar a que operen a un niño con cáncer de recto o que van a liberar el Tíbet o qué se yo cuantas pendejadas más.

No me explico cómo es que siendo tan idiotas no se les ha olvidado cómo respirar.

viernes, enero 06, 2006

Hablando de los reyes

Ayer en la noche me dí una vuelta por el mercado, había una cantidad considerable de gente comprando juguetes, muchos de ellos llevaban videojuegos.

IDIOTAS

En este planeta no hay un solo escuincle en edad de jugar Xbox que crea en los reyes magos, quien afirme lo contrario se está engañando o es de hecho un perfecto imbécil.

Bien, la maldita larva humana ya no cree en los reyes magos, pero de todos modos quiere juguetes el 6 de enero, ¿por qué motivo alguien con su cerebro intacto sale a comprar el maldito juego el 5 de enero en la noche?

No se necesita estudiar cuatro años de mercadotecnia para deducir que en esa fecha en específico, como TODOS quieren comprar juguetes, los vendedores los dan al precio que se les antoja.

La opción más viable es esperar al día 6 en la mañana, cuando están por expirar los permisos temporales que la delegación otorga para vender en la vía pública, entonces cambia la cosa, todos quieren deshacerse de la mercancía, entonces es más fácil conseguir juguetes casi al costo.

No sé ni porqué les escribo esto, por lo que a mí respecta, síganse engañando o sigan siendo imbéciles.

martes, enero 03, 2006

Microbuseros, la onceava plaga de egipto

Tal vez estoy usando un término muy coloquial, vale la pena tomarme unas líneas para definir el concepto de "microbusero"

Por microbusero (o microbucerdo), debe entenderse que me refiero a la bestia mal domesticada que opera el transporte público colectivo semi-irregular.

Al decir "semi-irregular" queda entendido que no entran en este rubro los operadores de autobuses y trolebuses, ya que éstos son trabajadores asalariados, los microbuseros tienen que entregar diario una cuota al dueño del microbús, lo demás que ganen es para ellos.

Esto quiere decir que entre más dinero junten, mejor para ellos, y entre más gente lleven, conseguirán más dinero, lo anterior genera muy diversas consecuencias, las cuales intentaré analizar a continuación:

1 En las bases (donde inician su recorrido) se hacen pendejos el tiempo que sea necesario hasta que no quede un asiento libre.

no importa si les lleva tres minutos o una hora, estos cabrones no despegan la vista de la sección deportiva de su periódico si hay aunque sea un lugar libre.

Recuerdo que en una ocasión, uno de estos malnacidos desperdiciaba miserablemente mi valioso tiempo por DOS PINCHES LUGARES.

Todos los que nos encontrábamos a bordo estábamos que nos cargaba la chingada, pero nadie se atrevía a decir nada, si se la haces de a pedo a un microbusero en la base, lo único que vas a lograr es que el resto de la manada te reviente completamente el hocico, y ni quien carajos se anime a ayudarte.

Sin embargo yo no estaba como para quedarme callado y portarme bien, así que desde mi asiento me limité a decir con voz fuerte "¿Que pedo, quieres los cinco pesos que faltan para largarnos?

Si bien no se cagaron de risa, los demás pasajeros se rieron un rato con ganas, el pobre pendejo no supo ni qué contestar, solo miraba a todos lados, como esperando que alguien se apiadara de su estupidez y le dijera qué hacer.

En ese momento subieron un par de gentes y el pleito no llegó a más.

En otra ocasión iré completando mi lista, por ahora tengo muchísima hueva

Me tienen hasta la madre TODOS

Desde hace algunos años he notado algo terrible, el mundo está repleto de idiotas.

Idiotas que manejan el taxi en el que te subes, idiotas que cuidan la entrada de casi todos lados, idiotas que entregan pizzas, que trabajan contigo, es más, muy probablemente tú mismo seas un idiota de lo peor.

De no ser así, seguro conoces a uno o tienes uno en tu familia, en serio, piénsalo, todo el mundo tiene cuando menos un tío o un primo que cuando la familia habla de él dice cosas como "¿Te acuerdas del tío Gumersindo? ¿Qué crees que hizo ahora el muy pendejo?"

Es un hecho, el mundo entero está plagado de imbéciles, y en este blog pretendo escribir acerca de cada uno de ellos (o hasta donde llegue antes de que me muera).

Otro día que no tenga tantísima hueva comienzo con los pendejos que más padezco, los que manejan microbuses.