domingo, enero 06, 2008

Pasando a otra cosa

Iba a responder la última disertación del heredero de Moctezuma, pero parece que ya se me adelantaron, además ya me está aburriendo todo el asunto, si alguien carece de identidad propia y necesita adoptar la de sus ancestros de hace más de 500 años, muy su pedo y ojalá que consiga su montón de plumas.

Al respecto solo me queda reconocer que me pasé de pendejo con eso de "el nieto de Dalí", por lo demás ya no sé cual es el argumento de este tipo, primero me habla de la historia y cuando la historia no lo apoya, la descalifica y le da más importancia a la "tradición oral" si no se pone de acuerdo consigo mismo no voy a gastarme las huellas digitales escribiendole respuestas.

Vamos a empezar el año con una actitud positiva, en esta ocasión les voy a enseñar un juego con el que pueden pasar horas de diversión sin invertir más de tres pesos si lo hacen correctamente, pero por más idiotas que sean, el costo no se eleva demasiado.

¿Cuántas veces han gastado cientos de pesos en juegos de mesa que solo acaban sirviendo para llenarse de polvo en un rincón porque nadie quiere jugar?

Me caga que me salgan con mamadas como "Es que el scrabble es bien aburrido" o "Es que ese juego tiene preguntas bien raras"

O eso creo que dicen, porque lo único que oigo es "Soy demasiado idiota como para jugar algo que no sean trivias de programas de televisión o de futbol"

Este juego requiere de dos a siete jugadores mas o menos, lo bueno del asunto es que los otros jugadores no tienen que aceptar jugar, de hecho ni siquiera tienes que conocerlos ni preguntarles si quieren jugar.

Todo lo que necesitas es un boleto del metro y uno o dos globos (si de verdad quieres convertir el mundo en un lugar más extraño puedes sustituír los globos por condones)

Listo, solo debes inflar tu globo hasta lo que consideres que es la mitad de su capacidad, entrar al metro y con apariencia distraída empieza a estrujar el globo en repetidas ocasiones, de modo que dé la impresión de que está a punto de estallar.

Eso es todo, los demás jugadores de inmediato empezarán a hacer gestos extraños con el único propósito de divertirte, parece algo en extremo idiota, pero es genial, las reacciones de la gente son de lo más inesperadas.

Para reducir las posibilidades de que algún jugador arruine la diversión pidiéndote dejar de jugar, puedes fingir una llamada importante en tu teléfono celular, de este modo no solo pensarán dos veces antes de interrumpirte, además parecerá más natural que estés apretando nerviosamente un globo en un afán de liberar estrés.

No solo se puede jugar en el metro, también en camiones, aviones, esperando en una fila, en el banco, en la iglesia, en el banco, en un velorio, la imaginación es el límite.

Si deciden hacerlo, consígan un cómplice que fotografíe o grabe en video a los otros jugadores con la cámara de su celular y envíenlos, los mejores saldrán publicados aquí.

Odio a la gente, pero he de admitir que cobrar su karma es trabajo para más de una persona.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

AAA Y TAMBIEN SE PUEDE JUGAR EN EL BANCO, EN EL BANCO Y EN EL BANCO

Y SI QUIERES SER UN POCO CREATIVO PUES TAMBIEN EN EL BANCOO!!!

PENDEJOO!!

Anónimo dijo...

Yo conozco un juego mejor: Entras a www.megarotic.com, le das clic a cualquier video que te parezca agradable, te bajas los pantalones, te agarras el pito y te sales corriendo por toda la cuadra gritando:

¡Soy el Papa!

Sacas un video, lo subes a Youtube y me mandas el link a

caranarq@hotmail.com

Despues de eso puedes suicidarte, yo te lo agradeceria un chingo.

Si quieres hacerlo mas divertido puedes ponerte kolaloka en la mano.